¿Molesto?

No se a quién molesto más, a mí con mi incompatibilidad aparante o al resto por éllo mismo.
Me parece que cuanto más sacas la cabeza de la madriguera, más van a tirar de tí hacia dentro.
¿Temeis que el sol me queme, cuando hipócritamente vivís de él?
Sólo teneis miedo. De vosotros, de mí, de lo que podeis llegar a ser y yo veo...
¿No creeis que antes de obcecaros en vuestras pretensiones de seguridad debeis encontrar el lugar adecuado para éllo? Porque yo lo siento a kilómetros de distancia del campamento base.
¿Tanto os supone nuestro único reto, conocernos a nosotros mismos y compartir esta experiencia con los demás? Belleza es lo único que veo en éllo.
Lo bello no es lo mejor hecho, es lo que sin hacer trasciende toda creación. Y eso es lo que somos todos.
Puta belleza. Belleza pura y radiante que se consume a sí misma porque no se acepta, y establece criterios equivocados para decretar la que le rodea.
¿No os dais cuenta de que somos la puerta que buscamos, que se busca a sí misma, para saltar al vacio donde los pasillos se convierten en llanuras?
Me temo, como vosotros otras muchas cosas, que el peligro es un factor importante en este aspecto, peligro a perdernos durante la caida, a no comprenderla, a no llegar jamás a ninguna parte.
¿Pero hay mayor sensación que el peligro de caer eternamente allí donde todo es profundidad, donde no hay un suelo esperando para acabar con nuestra vida sino todo lo contrario?
Nuestra vida es un salto en paracaidas, el problema es que la confundimos con el avión.
Todos tenemos miedo, ¿pero te da eso derecho a no hacer nada?

Al menos dejarme caer tranquilo...